La estampa de colas frente a mostradores, preguntas, papeleos y esperas en el aeropuerto no le hace mucha ilusión a nadie. Aunque si lo que te espera fuera son paisajes increíbles, descubrir un país nuevo y amigos que todavía no conoces, quizás el cuento cambie un poco, ¿no? ¡Hoy te contamos cómo funciona el sistema de aduanas de Canadá para que vayas preparado!
Antes de volar
Para cruzar las aduanas de Canadá con un pasaporte de cualquier país de la Unión Europea, no habrá necesidad de sacar visado si tu estancia es inferior a seis meses. Sin embargo, si tu plan es ir a estudiar a Canadá, tendrás que sacarte un permiso de estudiante.
Además, si no eres de la Unión Europea, dependiendo de tu nacionalidad, tendrás que solicitar una visa de visitante. En este enlace puedes consultar qué tipo de documento necesitas solicitar dependiendo de tus circunstancias y tu país de origen.
En cualquier caso, no hace falta que te preocupes demasiado por estos trámites, nosotros te resolveremos todas las dudas que tengas antes de volar. ¡Pídenos ayuda! 🙂
Al aterrizar como estudiante
Para adentrarte en las fronteras de Canadá, te encontrarás con un agente de aduanas canadiense que te pedirá tu pasaporte y la documentación de viaje, te hará algunas preguntas y comprobará que cumples todos los requisitos para entrar en el país. También deberás mostrar una prueba de qué abandonarás el país una vez termines tu estadía. ¡Parece que son bastante estrictos con esto!
Nosotros consultaremos con la escuela si necesitas prueba de tu ingreso en Canadá. En caso de que necesites comprobante de ingreso, tu pasaporte deberá ser sellado por un oficial de servicios fronterizos antes de salir del aeropuerto.
Cuando te pares a hablar con un funcionario de fronteras tendrás que tener a mano lo siguientes documentos:
- Un pasaporte válido. Para entrar en el país te exigirán que tu pasaporte tenga una validez mínima de seis meses. ¡Pon mucha atención a este detalle para evitar problemas para entrar!
- La carta de presentación que la oficina de visados te envió al aceptarte el permiso de estudiante. Esta carta contiene el número de permiso al que estará ligada tu visa.
- Una copia de la carta que pruebe que te han aceptado en la institución en la que vayas a estudiar.
- Prueba de que tienes los suficientes recursos económicos para mantenerte en el país durante toda tu estadía.
- Cualquier otro documento que la oficina de visados te haya solicitado con anterioridad.
- En caso de que necesites un documento ETA (Electronic Travel Authorization) aprobado, te lo asociarán al número de tu pasaporte o visa de residente temporal.
Te recomendamos que lleves todos estos documentos en tu mochila o bolso de mano. ¡No los factures! Si al parar en el puesto fronterizo te falta documentación o alguno de los documentos tiene información incorrecta, tu entrada en el país podría ser denegada. Así que evita contratiempos desagradables y organiza todo el papeleo en una carpetita que puedas llevar cerca de ti.
El oficial de fronteras estampará tu pasaporte y te informará de cuánto tiempo tienes para permanecer legalmente en Canadá. En algunos casos pueden limitar o extender el tiempo de estancia para adaptarlo a tu periodo de estudio.
Si tienes cualquier duda o no estás seguro de algo, pregunta sin miedo, ¡Los canadienses son muy simpáticos! Si no tienes ningún problema en el punto de entrada, el oficial te dejará entrar a país y registrará tu permiso de estudios. En este momento deberías comprobar que toda tu información personal incluida en tu visa de estudiante es correcta.
Aterrizando como turista
Si entras al país como turista, las preguntas frecuentes en el aeropuerto serán:
- Tu plan de viaje.
- Dirección exacta donde te vas a quedar.
- Si dices que vas a visitar a familiares o amigos te podrán pedir un número de contacto y, en el caso de los amigos, querrán que les expliques de qué los conoces.
- Tiempo de estancia en el país.
- Fecha del billete de vuelta.
Normalmente, el paso por las fronteras de Canadá se queda en un repertorio de preguntas que podrás responder fácilmente si llevas todos los datos a mano, el problema suele surgir con turistas que intentan entrar solo con billete de ida.
Esto suele crear suspicacias en el agente de aduanas y querrá interrogarte con detenimiento o incluso negarte la entrada al país. Al fin y cabo, lo que intentan evitar los agentes de inmigración es la entrada de «turistas falsos» o gente que quiere hacerse pasar como turista, pero que su intención es establecerse en el país.
Son las propias aerolíneas las que comprueban la documentación de los viajeros antes de la partida del vuelo. Podrán pedirte explicaciones o, incluso, negarte el embarque. También se han dado casos de viajeros que han sido obligados a comprar un billete de vuelta como condición para embarcar.
Algunas restricciones importantes
Si pretendes pasar las aduanas de Canadá con una cantidad superior a 10.000 dólares canadienses debes declararlo.
En caso de que no lo hagas, podrías ser multado o inclusos tus fondos económicos podrían ser confiscados. Los 10.000 CAD incluyen efectivo, acciones, bonos, obligaciones, cheques y otras formas de dinero.
Al cruzar las fronteras de Canadá tampoco está permitido introducir muchos productos de origen animal (carnes y lácteos), así que en el caso de que te registren la maleta y localicen este tipo de productos, serán inmediatamente confiscados.
Como turista, puedes alegar desconocimiento, pero si eres residente seguramente recibas una multa por ello.
Ten cuidado también con los límites de alcohol permitidos en la entrada al país. Aunque a mucha gente le encantaría que fueran un poco más flexibles con esta norma -principalmente para evitar los elevados precios del alcohol dentro del país- los agentes de fronteras de Canadá te permitirán como máximo pasar con una botella de licor de fuerte graduación, un litro y medio de vino o una caja de 24 latas de cerveza.
La entrada de tabaco también está limitada. Podrás llevar como máximo 200 cigarrillos, 50 puros y 200 gramos de tabaco en granel.
Si te quedan más dudas, ¡contáctanos y te las resolvemos!
